
A lo largo del desarrollo del embarazo puede aparecer factores que lleva a la mujer convertirse en un embarazo de riesgo, el cual se define como cualquier condición médica u obstétrica inesperada o imprevista asociada con un embarazo con un peligro real o potencial para la salud o el bienestar de la madre o el feto.
El control prenatal es de suma importancia, ya que mediante acciones sistemáticas periódicas se puede detectar factores que puedan condicionar morbilidad o mortalidad materna o perinatal.
Los problemas perinatales que se desea prevenir son la prematurez, la asfixia perinatal, las malformaciones congénitas y las infecciones; y desde el punto de vista materno, la hemorragia obstétrica, las infecciones, el síndrome hipertensivo del embarazo y las enfermedades maternas pregestacionales.
Factores de Riesgo
En la valoración del riesgo perinatal distinguimos dos niveles de actuación; la clasificación de las gestantes en bajo riesgo o alto riesgo, en el que el objetivo es determinar cuáles son los embarazos que tienen una mayor probabilidad de presentar resultados perinatales adversos por estar asociados a uno o más factores de riesgo obstétrico.
Algunos de los factores específicos que podrían contribuir a que un embarazo sea de alto riesgo son los siguientes:
1) Edad extrema de la madre, es decir o muy joven o con una maternidad avanzada.
2) Falta de control preconcepcional
3) Falta de control prenatal
4) Estatura, peso, tabaquismo, alcoholismo y consumo de drogas
El concepto embarazo de riesgo hace referencia a aquel en el que se detectan una o más circunstancias o factores que, por su naturaleza, pueden suponen un riesgo para la gestación actual, pudiendo afectar negativamente a los resultados materno fetales. La gineco-obstetricia actual ha logrado grandes éxitos en los factores para un embarazo de riesgo educción de la morbimortalidad materna, por lo que actualmente se ha centrado la atención en los aspectos fetales y neonatales, así como en identificar al subgrupo de mujeres embarazadas que requiere de una mayor vigilancia y cuidado a consecuencia de presentar factores de riesgo claramente identificables, sea antes o durante el embarazo.
Fuente: Gaitán, E. S. (2019). Factores para un embarazo de riesgo. Revista Médica Sinergia, 4(9), e319-e319.