El ultrasonido es una herramienta esencial para las ginecólogas, es un estudio no invasivo, a través de imagen que ayuda a rastrear los órganos internos femeninos.
Asimismo, son el medio para revisar los órganos como ovarios, útero, el endometrio y cérvix.
Existen dos tipos de ultrasonidos que se ocupan en la ginecología:
- USG pélvico (El transductor se coloca por encima de la pelvis)
- USG Trasvaginal o Endovaginal (El transductor se introduce por la vagina)
Recordemos que existen padecimientos propios de nuestros órganos internos femeninos, como lo son los ovarios poliquísticos, miomas, quistes ováricos, embarazos ectópicos, endometriosis, por mencionar algunos.
En muchos de estos padecimientos se detectan por ultrasonidos. Por ello es importante realizar ultrasonidos de manera rutinaria mínimo una vez al año para tener un control completo y así poder evitar cualquier complicación clínica en un futuro.
Al tener un diagnóstico precioso, las especialistas podrán dar el tratamiento adecuado.
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